Antes que nada hay que apuntar que el padrón de Melilla está dirigido por los funcionarios melillitas de toda la vida y se ha podido observar comportamientos extraños que siempre tienden a relativizar a la población originaria de Melilla. Por ejemplo, se han contabilizado muertos peninsulares de alta en el padrón después de su muerte, o funcionarios peninsulares que tras cumplir servicio y retornar a la metrópoli continuaron de alta. Rara vez ocurre eso cuando se pertenece a la población originaria, pues hay un sesgo en la administración conocido por todos los melillenses.
Otro aspecto a destacar de la limitada representatividad del padrón de Melilla es una destacada población extranjera europea (casi un millar, 921), inexistente en la realidad de la ciudad. Los lugares de origen son los de asentamiento de la diaspora rifeña-marroquí (Holanda, Bélgica, Dinamarca...). Es un población fantasma, porque son personas que viven en Marruecos aunque están dados de alta en la ciudad, porque es parte del territorio comunitario y sirve a sus asuntos administrativos.
Además del interés de la administración colonial por maquillar, en geografía, historia y demografía, la realidad autóctona de Melilla, también hay un interés por inflar la población de Melilla en general, lo máximo posible. Ello para mantener a la ciudad militarizada y se justifique la llegada de más trabajadores de la metrópoli, sobre todo policías.
Dicho todo lo cual, procederé en un breve estudio aproximativo a nalizar la realidad poblacional de Melilla y los retos a los que nos enfrentamos.
LA POBLACIÓN INFANTIL MELILLENSE. UNA POBLACIÓN FUNDAMENTALEMENTE RIFEÑA
Sabemos por el INE que la población menor de edad de Melilla, con DNI, asciende a 22.252 personas. De acuerdo a la realidad observada directamente en el Hospital y los colegios e institutos, en este sector de edad la población autóctona rifeña ha de aventajar a la peninsular en una proporción de hasta 3 de 4, es decir de hasta 16.689 niños autóctonos frente a unos 5.563 europeos.
A los hasta 15.042 menores autóctonos rifeños con DNI habría de sumarles 2.781 menores autóctonos bajo la consideración de extranjeros marroquíes residentes en Melilla. En total, habría hasta 17.823 menores autóctonos frente a unos 5.563 menores irumiyen. El futuro de Melilla es claramente rifeño.
LA POBLACIÓN ADULTA DE MELILLA. UNA POBLACIÓN JOVEN, FEMENINA Y... MORA
Según el padrón, la población adulta de Melilla es de 51.235 personas. En este grupo, la población autóctona ha de ser más númerosa en los estratos de edad más jóvenes decreciendo su proporción conforme ascendemos a los estratos de edad más avanzada, donde la población peninsular puede aventajarla. Para esta conclusión, me baso en que la población autóctona rifeña es una población más joven que la europea peninsular, debido a los diferentes hábitos y cultura arraigados, así como el potencial procreador de la mujer autóctona musulmana.
LA EMIGRACIÓN ESPAÑOLA A MELILLA
Según el padrón municipal, los inmigrantes procedentes de España en Melilla ascienden a 13.298 personas, que se repartirían entre la población adulta y menor de edad del padrón de Melilla. Sumé todas las cifras y me salía un excedente de 4.545 respecto a la población total, que deben ser los menores españoles migrantes, incluidos también como población menor de edad. De ahí que la población migrante haya de estar en unos 8.753 individuos adultos.
¿SOMOS LOS RIFEÑOS LA MAYORÍA DE LA POBLACIÓN EN MELILLA?
En el panorama más favorable para los colonos, si aceptaramos el dudosísimo mantra de la administración colonial que reduce la población originaria de Melilla a la mitad de la población, los irumiyen de Melilla (melillitas) serían unos 21.241 de las 42.482 habitantes adultos. A ellos habría que añadir unos 5.563 menores irumiyen y unos 8.753 inmigrantes traídos de la metrópoli para reforzarles. Lo que elevaría a la población tharumec hasta los 35.557 colonos.
A los estimados 21.241 autóctonos rifeños de Melilla, habría que añadir unos 16.689 menores y hasta 11.108 autóctonos procedentes de Marruecos y Europa, elevándose la población autóctona hasta los 49.038 personas. Es decir, el 57,96% Dicho con otras palabras, aún partiendo de tesis muy matizadas y dudosas, los datos de la administración colonial podrían reconocer que el 60% de la actual población de Melilla es rifeña.
La realidad que vemos en la calle no se corresponde en absoluto con que seamos un 60% de la población. En las calles, colegios, institutos, hospital... de Melilla sólo vemos mujeres musulmanas, que se destacan por ser jóvenes, e ir hijos, y también chicas rifeñas menores de edad.
LOS COLONOS FRENTE A LAS CUERDAS. CONSECUENCIAS DE LA HEGEMONÍA DEMOGRÁFICA
A menos que opere un cambio, que es en lo que está trabajando el Estado español y los melillitas. La población futura de Melilla será esclusivamente rifeña. Los progresos en la situación de los rifeños desde 1987 han sido esclusivamente por este crecimiento natural.
El comportamiento natural demográfico de los europeos peninsulareses es radicalmente diferente. Los colonos son una población envejecida, que difícilmente puede aspirar más que a ser una minoría en Melilla. Desde el Estado español sin duda se tiene en cuenta la cuestión y no me parece ajeno a ella que se esté trayendo a peninsulares a trabajar desde la metrópoli, mientras se colabora de manera pasiva con que miles de rifeños abandonen la ciudad para emigrar a Alemania.
0 comments:
Publicar un comentario