Antes de nuestra "victoria de Anual", Sidi Muhammad Azmani, vecino de la calle General Barceló, pasaba por un acomodado comerciante musulmán. Se destacaba por acoger en su casa familias de refugiados imaziguen y tenía excelentes relaciones con los colonos españoles y con la población judía.
La "victoria de Anual" supuso un giro en su destino, fue el inicio de las sospechas de los colonos sobre ese moro al que llamaban "el gato". Otro "amigo de España", alertaría de que la resistencia rifeña había respetado los bienes y propiedades de Azmani pero los suyas no. Sospechoso... La coartada colaboracionista de Sidi Muhammad Azmani se tambaleó más cuando se supo que el jefe de la harca que atacaba Melilla era primo hermano suyo.
El informe secreto sobre Azmani llegaría al Alto Comisario, el General Dámaso Berenguer, y el moro gato sería detenido en un escándalo monumental, para ser luego juzgado por alta traición.
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