El patriarca de esta importante familia melillense era el colaboracionista Ahmed Amor Zraq, quien procedente de Fez se estableció en Melilla durante la época del protectorado. Desde la Calle del General Marina (en el edificio que hoy sirve de sede de la Seguridad Social) se dedicará a proveer suministros militares a la Mehala Jalifiana, la pantomima de Ejército indígena. Ahmed Amor Zraq casó en 1925 (durante la dictadura de Primo de Rivera) a su hija, Fadela Amor con el Comandante Mohand ben Mizzian Belkazem, el Teniente que dirigió a la Mehala Jalifiana, en representación del Sultán Yússuf, contra el pueblo rifeño constituido en la República del Rif.

Estas dos familias unificadas en matrimonio, los Amor y los Mizzian, tendrán un papel director de la comunidad tamazight originaria de Melilla. Ahmed Amor es recordado por los melillenses amazíes más antiguos por su obra social en las épocas de pobreza. Durante la Guerra Civil, en 1937, el Comandante Mizzian fundaría la Agrupación de la Comunidad Musulmana de Melilla, que junto a a la Agrupación de la Comunidad Musulmana de Ceuta fueron, citando a Ana Planet Contreras, el instrumento para controlar al colectivo musulmán de ambas ciudades. La familia Amor vivía en un chalet que sigue en pie y es propiedad de Fadela Amor, como lo era el emblemático Edificio Metropol.
La matrimonio Mizzian-Amor tuvo siete hijos, seis niñas y un varón,
Mustafá, que tras licenciarse en la Academia de Artillería de Segovia, se integró en el Ejército marroquí participando en la "
Guerra de las Arenas" entre Marruecos y Argelia. Moriría a temprana edad.
Su hermana, Zelija, se convirtió al cristianismo asumiendo el nombre de María, para casarse con un oficial en Tenerife, sobrino del ultracatólico Ministro franquista de Asuntos Exteriores, Alberto Martín-Artajo, responsable de la protección y amparo de destacados nazis huidos de la Justicia. Estos hechos se produjeron siendo Mizzian Capitán General de Canarias (1955-1956).
Acabado el sistema del Protectorado, Mizzian sería nombrado Mariscal en Marruecos, y
se dará fin a la poca organización que tenían las comunidades originarias de
Ceuta y Melilla (la
Agrupación de la Comunidad Musulmana). A los
marroquíes se les concederán meras Tarjetas de Estadísticas
familiares, pasando a ser comunidades apátridas (ni españolas ni marroquíes),
subjetas a deportaciones por los motivos más intrascendentes y desprovistas de
los derechos cívicos y aun humanos más fundamentales.
Mientras las comunidades originarias de Ceuta y Melilla, eran desprovistas
de los pocos derechos que tenían, Ahmed Amor y Mhamed Mizzian volvían a
Marruecos, donde el segundo era nombrado Mariscal. Kamal Slimani nos cuenta
que cuando Mohamed V,
visitó por primera vez Alhucemas en 1957, los soldados del Mariscal Mizzian
eran los responsables en garantizar la seguridad del Sultán y sus hijos durante
la visita. Uno de sus soldados de entre la multitud de rifeños
que acudieron al encuentro del monarca, lanzó una piedra que impactó en la
nariz del ya príncipe Hassan provocándole la rotura del tabique nasal. El hecho
provocó una carga contra las masas para detener aquel supuesto rebelde, se
detuvieron a decenas, muchos fueron torturados hasta morir. Aunque no hubo
cancelación de la visita real a Alhucemas, este hecho quedó grabado en la
mentalidad del que seria el futuro rey Hassan II. Franco y Mezzian estuvieron
al tanto, pero la verdad no se sabría hasta pasados medio siglo después, pero
que habían encendido el estallido de la rebelión del 58-59.
De Mizzian también hay que destacar el rapto de su hija convertida al
cristianismo y casada con un español, en una visita que hizo el matrimonio a
Tetuán, tal como expone Miguel Alonso Baquer:
"Pretendía casar a una de sus hijas con un musulmán, pero la chica, acostumbrada a vivir en España, desobedeció al padre y se casó con un capitán español. Parecía pasada la tormenta, y la pareja viajó a Tetuán, donde Mizzian hizo raptar a la recién casada, la envió a Tánger y obligó a su marido a regresar a España... La noticia corrió de boca en boca e irritó a numerosos militares, pero Franco se inhibió y la pareja no pudo volver a reunirse”
Otras de las hijas de la familia Amor-Mizzian se casó con el General Mohammed
Madbuh, Militar-Ministro marroquí de Correos, Telégrafos y Teléfonos (PTT),
el cual caería asesinado cuando intentó un golpe de Estado contra el Rey Hassan
II. El General Mizzian, a pesar de ser rifeño y familiar del golpista, no
sufrió represalias. No en vano, era un hombre de la confianza de los dos
regímenes que administran el Rif.
Por último, la hija Leïla Mezian
Benjelloun, nació en Valencia y es oftalmóloga, casada en 1960 con quien
amasaba unas de las mayores fortunas en Marruecos. Es la responsable del principal museo dedicado a su padre, localizado en la comunidad contigua a Melilla de Beni Enzar, en los territorios
de Az Zahra, de donde procedía Mizzian y mi abuela materna.